Tomar la decisión de irse a vivir al extranjero puede ser muy sencillo si la iniciativa viene determinada por la oferta de un buen trabajo, la motivación de la aventura o nos vayamos a vivir con alguien originario del país. Pero puede ser un poco más complicada si nuestro viaje está motivado por la necesidad de buscar una nueva vida fuera de nuestro país. En cualquiera de los casos, debemos preparar bien la mudanza para evitar complicaciones e ir totalmente cubiertos ante posibles eventualidades. Si vienes de fuera y deseas quedarte a vivir en España, meter un seguro de salud en tu maleta debería ser uno de los puntos a comprobar en la lista de cosas por hacer.

Me voy… y ahora, ¿qué?
Lo hemos pensado una y otra vez, hemos valorado los pros y los contras, y finalmente hemos tomado la decisión: ¡nos marchamos a iniciar una nueva etapa en el extranjero! Puede que sea algo temporal o que nos lo planteemos sin fecha de vuelta. También puede ocurrir que los que emigren sean nuestros hijos para estudiar en otro país. Toda una aventura y una experiencia que nos marcará por siempre. Vivencias nuevas, personas por conocer, un idioma por dominar… Muchas dudas y miedos rondan nuestra cabeza. Todos los que deseen movilizarse para crear una vida nueva deberían tener en cuenta estos consejos a la hora de preparar el viaje:
 

• Organiza la mudanza con tiempo: Saber cuánto antes qué nos vamos a llevar y qué hacer con lo que dejamos. Si vivimos de alquiler, deberíamos informarnos del periodo con el que legalmente debemos avisar al casero de que nos vamos, para no tener problema con la devolución de la fianza. Así mismo, hay que controlar el tema de las bajas en suministros y de las comunicaciones, que puede costarnos muy caro si tienen penalización por darnos de baja antes de tiempo. Sobre las cajas… cuanto antes nos pongamos a hacerlas, mejor. Y, recomendación sentimental, no hay que dudar en meter algún objeto personal con significado en tu maleta, los primeros tiempos siempre son duros y tener cosas personales junto a nosotros puede ayudar a pasar esos momentos de nostalgia.

• Documentos: Tener claro qué documentación es imprescindible gestionar para poder residir en el país en el que hemos elegido vivir. Documento de identificación y pasaporte en vigor, parece algo bovio, pero puede ser que con los nervios se nos pase. Informarnos de cómo abrir una cuenta bancaria en el país de llegada y comprobar si nos compensa mantener la del nuestro junto a sus tarjetas. Quizá las comisiones que nos cobren indiquen que es mejor anularlas o negociar con el banco. La documentación de nuestros temas nacionales debe estar a buen recaudo, nuestro o de algún familiar, por si los necesitamos para algún trámite. Si nuestro viaje es por temas laborales, preguntar si tenemos que hacer alguna validación de títulos, másters, cursos, etc.

• Temas prácticos imprescindibles cuando lleguemos: ¿Nuestras tarjetas españolas nos valen para ir tirando con los gastos de los primeros días o debemos llevar bastante dinero en efectivo? En caso de cambio de moneda, que no nos pille el toro. Calcular los gastos mensuales para ir con un presupuesto cerrado y, por lo menos los primeros meses, tenerlo todo controlado, ya que ese tiempo supondrá un desembolso económico importante por la mudanza, la comida, el transporte, el alquiler… Preguntar sobre temas tecnológicos, cómo funciona internet, qué tipo de enchufes se usan, facilidad para comprar tarjetas móviles o conseguir una línea en casa…

• Sanidad: Es quizá el tema más importante, porque no hay nada con más importancia que nuestra salud. Conocer el tipo de sistema sanitario en el país de acogida. Es imprescindible saber si nos atenderían de urgencias en cualquier centro en caso de enfermedad o accidente y cuánto nos costaría, así como la asistencia a cualquier consulta de especialista. ¿Nos cubre nuestro nuevo trabajo con un seguro médico o podemos inscribirnos en la institución de sanidad social del país? Si tomamos algún tipo de medicación, ¿podremos conseguirla en el lugar de destino?

 
Si eres de los que sigues meditando la decisión de irte a vivir a un país extranjero o por el contrario has decidido venir a vivir a España, en Santalucía te ofrecemos seguros de salud a tu medida: la mejor manera de garantizar el inicio de una nueva etapa con el menor número de contratiempos posibles.