Hace pocos días celebrábamos el Día Mundial Contra el Cáncer para hacernos eco de esta enfermedad que puede afectar a todas las personas por igual y por desgracia los niños y los adolescentes también están incluidos.
Bien es cierto que el cáncer infantil no es tan frecuente como en adultos, pero aun así es la primera causa de muerte por enfermedad en niños hasta los 14 años. Aunque los datos son muy esperanzadores ya que los casos de supervivencia en niños con edades de 0 a 14 años ha aumentado hasta el 80%, según la Sociedad Española de Hemato-Oncología Pediátrica. Dato que se espera seguir mejorando hasta alcanzar el 100% de supervivencia.  
En España se diagnostican 1.400 nuevos casos nuevos cada año en niños de edades comprendidas entre los 0 y los 18 años. Según los datos, la leucemia es el tipo de cáncer más habitual, seguido de los tumores del sistema nervioso central y los linfomas.
En la actualidad existen diferentes factores que se han identificado como factores riesgo en el cáncer infantil. Estos factores son:

• Las radiaciones ionizantes
• La toma de dietilestilbestrol durante el embarazo, una hormona que se utiliza en algunos tratamientos.
• Constitución genética. Algunos cánceres tienen más incidencias entre ciertas poblaciones étnicas.
• Predisposición individual. En algunos casos, la predisposición genética de cada individuo puede actuar como un factor decisivo.
• Algunos virus como el EBV, hepatitis B, herpes humano o el del VIH pueden incrementar los riesgos de padecer ciertos tipos de cáncer infantil.

Si nos fijamos en datos globales, al año más de 250.000 niños son diagnosticados y de ellos unos 90.000 mueren cada año a causa de esta enfermedad. La mayor parte de los casos se dan en países subdesarrollados donde la tasa de supervivencia no supera el 20%. Por el contrario, en los países desarrollados los niños diagnosticados de cáncer que sobreviven a la enfermedad son entorno al 80 -90% de los casos.
Estas tasas de supervivencia tan desiguales se deben a diversos factores como:

• Falta de información sobre síntomas
• Falta de información sobre la enfermedad
• Diagnóstico tardío
• Mal diagnóstico
• Dificultad para acceder a un tratamiento
• Costos elevados de los tratamientos y medicamentos
• Infraestructura sanitaria débil
• Abandono del tratamiento

Según los expertos el 70% de los cánceres infantiles se podrían curar con los tratamientos actuales, aunque cada caso depende del tipo de cáncer y de factores externos como la infraestructura del sistema sanitario y las condiciones socio-económicas.
Teniendo en cuenta todos estos datos sobre el cáncer infantil, se vuelve fundamental la cooperación de la sociedad en general. Investigación, medios, accesibilidad a los tratamientos y compromiso por parte de las instituciones tanto públicas como privadas; ya que el cáncer y, más aún, el cáncer infantil es cosa de todos.  Entre todos conseguiremos frenar esta enfermedad.