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Día a día se vuelve más importante el ahorro energético. Contribuir a la sostenibilidad del planeta es una de las máximas de gobiernos e instituciones. Por ello, en los últimos años se han puesto en marcha diferentes acciones para contribuir a la eficiencia energética y dar a conocer a las personas las medidas que se pueden llevar a cabo.
Una de estas medidas ha sido el certificado de eficiencia energética. Desde hace unos diez años es obligatorio en edificios de nueva construcción, pero también para propietarios que quieren vender o arrendar un piso con más años. Además de los edificios, los electrodomésticos también tienen que venir con el etiquetado de eficiencia energética.

Qué es

El certificado de eficiencia energética es un documento que acredita el consumo de energía de tu hogar. El baremo va desde la A hasta la G, siendo la A la más eficiente y la G la que menos. Por si con las letras no fuera suficiente, cada una de ellas va acompañada de una escala de colores para hacer mayor hincapié a la menor o mayor eficiencia.
Por otro lado, también existe la etiqueta energética que es la pegatina con la que vienen acompañados ciertos electrodomésticos para aportar al consumidor información sobre su consumo y repercusión en el medio ambiente. Por ejemplo, los calificados como A+++, A++ y A+ son los más eficientes del mercado y por tanto los que menos consumirán.   

Qué electrodomésticos deben llevar el etiquetado energético

Los electrodomésticos que están obligados por la normativa Europea a ir acompañados de la etiqueta energética son:

  • Lavadoras
  • Lavavajillas
  • Frigoríficos
  • Congeladores
  • Lavadoras
  • Horno eléctrico
  • Fuentes de luz domestica

La eficiencia energética de un electrodoméstico se basa en su consumo eficiente, que se entiende como la capacidad que tienen dichos aparatos para llevar a cabo sus funciones consumiendo la menor cantidad de energía posible.

Cómo conseguir un hogar eficiente

Para conseguir que toda tu vivienda sea lo más eficiente energéticamente hablando, es importante que tanto el certificado energético del hogar como el etiquetado energético de los electrodomésticos vayan en consonancia.
Al conseguir un hogar eficiente no solo se ayuda a mejorar el medio ambiente y a preservar los recursos naturales, sino que también, ayudamos a mejorar la economía de los hogares. Con un hogar eficiente se consumirá menos energía, por lo que el ahorro a final de mes se notará en las facturas eléctricas.
De primeras puede suponer un esfuerzo económico para los hogares, pero a la larga se notará en las facturas de la luz.
Si quieres ayudar a contribuir al medio ambiente consumiendo menos energía, también puedes tener en cuenta otro tipo de aparatos que consumen energía y utilizamos a diario como los automóviles, los ordenadores o los aparatos de climatización.
Desde Santalucía te recomendamos que antes de comprar cualquier aparato, te informes bien de su consumo energético. Ayudar a conservar el medio ambiente y reducir los gastos está en tu mano.

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