Estar protegido ante accidentes debería ser obligatorio para todos
Los incidentes desagradables están a la orden del día y tu familia tiene la necesidad básica de estar cubierta ante posibles incidencias. Por eso, estar protegido ante accidentes debería ser obligatorio para todos. Hoy, desde Santalucía, te explicamos las ventajas que implica tener un seguro de accidentes:
Cobertura de nuestro seguro de accidentes
Una protección ante accidentes te cubrirá en tu ámbito personal o dentro de tu actividad laboral, así como en situaciones de invalidez permanente, incapacidad laboral o fallecimiento. También, podrás contratar otras coberturas adicionales como el subsidio por hospitalización por accidente, la asistencia en viaje, asistencia sanitaria y domiciliaria, protección jurídica integral o asistencia sanitaria y domiciliaria.
Existen tres modalidades para este seguro:
Accidentes General: pensado para cualquier persona, ya que todos somos susceptibles de tener un accidente, con independencia de la edad, profesión o estilo de vida. Es un seguro genérico para cualquier necesidad de protección frente a un accidente.
Accidente Dinámico: perfecto para los autónomos. Si tienes tu propia empresa no dudes que es tu seguro ideal.
Accidentes ama de casa: perfecto para ti si no tienes una actividad profesional fuera de tu hogar y sientes la necesidad básica de estar protegida frente al fallecimiento o la invalidez.
Es importante que sepas que podrás contratar una cobertura de ámbito parcial o total:
- Tienes la opción de estar protegido durante las 24 horas del día a través de un teléfono de asistencia.
- Protección en el ámbito laboral, exclusivamente.
- Cobertura con la limitación al ámbito personal. Esta opción no puede ser contratada por autónomos.
El capital que inviertas en tu seguro de accidentes no perderá el valor con el paso del tiempo. El IPC revalorizará la prima que pagues. Además, podrás contratarlo desde los 16 años hasta los 64, inclusive.
Con Santalucía puedes contratar un seguro de accidentes a tu medida. No permitas que la desprotección, ante cualquier incidencia, frente tu ritmo diario.