Área privada

Cuántas veces os ha pasado que vais tranquilamente por la carretera y/o autovía y… ¡atasco! Pero a los dos minutos la circulación vuelve a ser normal. ¿Por qué ocurren? Para desvelar estos misterios, hemos creado el post de hoy.

Causas de los atascos

Lo habitual es que los atascos se formen en periodos vacacionales o en horas punta cuando los vehículos que circulan en carretera superan la capacidad de la misma. Por ejemplo, en una autovía normal con dos carriles para cada sentido, la capacidad sería de unos 4000 vehículos.  No haría falta rebasar este número para provocar un atasco, ya que cuando la cifra se va acercando, los automóviles tienden a disminuir la velocidad para no circular muy pegados.
 
Este tipo de atascos que tan pronto paras como aceleras son los conocidos como “atascos acordeón”. La mayoría de ellos se producen por obras, accidentes o por malas prácticas de los vehículos.
El funcionamiento de los atascos acordeón es más sencillo de lo que piensas. Pongamos que vas circulando por la autovía sin mantener la distancia de seguridad con el vehículo de delante y este frena. Lo que pasaría es que tú deberías pegar un frenazo repentino que provocaría que todos los vehículos que van detrás se viesen obligados a frenar, llegando incluso en algunas ocasiones a tener que parar por completo.
Este efecto se va “contagiando” por la carretera, provocando que los conductores no tengan tiempo de reacción y las consecuencias se noten más. Por eso muchas veces, los primeros vehículos simplemente aminoran un poco la velocidad, mientras que los de más atrás perciben un atasco más importante.

Evitar los atascos

No existe una fórmula exacta para prevenir los atascos, ya que son muchos los factores que influyen en ellos. Pero sí puedes tomar una serie de medidas que te ayuden a prevenirlos.  

  • Planificar el viaje evitando las horas punta y los días de mayor afluencia.
  • Evitar las vías más transitadas.
  • Informarse sobre el estado de las vías: obras, accidentes…
  • No pararse, ni alterar la velocidad más de lo necesario en caso de que se produzca un accidente para no provocar retenciones mayores.
  • Mantener una velocidad constante. Puedes optar por utilizar el controlador de velocidad crucero para facilitarte el viaje.
  • No realizar maniobras bruscas que puedan alterar la conducción de otros vehículos. Se deben señalizar para que los otros conductores tengan tiempo de reacción.

Consejo

Mantener la distancia de seguridad no solo es útil para prevenir accidentes no deseados, sino que también sirve para evitar los atascos. A mayor distancia, el tiempo de reacción de los otros conductores será mayor.

Principios de una conducción eficiente
¿Recuerdas estas señales de tráfico?