Área privada

Hasta hace tan solo unos años, parecía que la única forma que tenía un particular de acceder a un vehículo era comprándolo. Sin embargo, el mercado automovilístico ha evolucionado hasta ofrecernos opciones como el renting y el leasing. Ahora bien, ¿sabemos exactamente en qué consisten estas posibilidades? ¿O qué conviene más del renting vs leasing?

Si has llegado hasta aquí lo más probable es que no, pero no te preocupes, vamos a contarte todo lo que necesitas saber para poder decantarte por uno de estos dos sistemas.

Qué es renting y leasing

Lo primero que debes tener claro antes de elegir una u otra opción es qué significa cada una de estas prácticas y, sobre todo, a qué te obligan.

  • El renting es un sistema de alquiler de coches. El usuario paga por el tiempo de uso, pero no tiene ningún tipo de opción a hacerse con el vehículo en un futuro. Básicamente, contrata el uso del vehículo mientras lo necesite, pero al final de la relación comercial debe devolverlo.
  • El leasing, por el contrario, es una forma de financiación que permite una mayor amplitud de miras. Por una parte, es un contrato de arrendamiento, ya que las cantidades que se abonan durante un determinado periodo de tiempo son en concepto de alquiler. Por la otra, el usuario del vehículo puede decidir ejercer una opción de compra sobre él.

Aunque el leasing nació como un servicio para empresas y empresarios, cada vez son más las compañías que ofrecen soluciones que se ajustan muchísimo a este modelo también para usuarios de a pie.

Leasing vs Renting: Diferencias básicas

Aunque el leasing y el renting suelen confundirse, en realidad tienen varias diferencias claras entre sí:

  • El renting está pensado para los particulares, mientras que el leasing surgió como una solución para autónomos y empresas.
  • El renting se limita al alquiler temporal de un vehículo. Sin embargo, el leasing permite a quien lo contrata decidir quedarse con el vehículo en propiedad.
  • Además, el renting es una relación comercial pura y dura, un contrato de alquiler, mientras que el leasing es una solución de financiación para iniciar una flota de vehículos propia.

En lo que sí se parecen ambas soluciones es que son una forma de acceder a un vehículo, ya sea de transporte o de carga, y en que no tienen por qué implicar la posterior adquisición de dicho vehículo.

Renting vs Compra, ¿merece la pena?

Una de las preguntas que más se hace quien se plantea recurrir al renting es si realmente merece la pena alquilar en vez de comprar. La respuesta, por desgracia, no es universal: depende.

Depende del uso que se le vaya a dar, así como de la cantidad de dinero de la que se disponga en el momento de la necesidad de acceder a un vehículo.

Lo que sí es seguro es que, se elija la opción que se elija, contar con un buen seguro de coche es vital para nuestra tranquilidad. En caso de recurrir al renting, la empresa que nos proporcione el vehículo nos facilitará su contratación, mientras que en el caso de hacer la compra convendrá recurrir a una aseguradora de garantía.

Clasificación de los diferentes tipos de pegatinas de la DGT
Descubre todos los tipos de seguros de autocaravanas a tu disposición