Como cada año, la llegada de la Navidad divide en dos a nuestro país: los que eligen Nochebuena y los que prefieren esperar al Día de Reyes para abrir los regalos. Sin lugar a dudas son los pequeños de la casa los que más disfrutan de estas fechas llenas de magia y alegría, aunque para muchos de nosotros estos días también son especiales al estar cargados de sorpresas y reencuentros familiares. La ilusión que tenemos desde niños por la Navidad hace que siempre vivamos estas fiestas con gran entusiasmo y emotividad.
Sin embargo, existen distintas formas de vivir esta festividad. Unos prefieren al entrañable personaje de Papá Noel que entra en las casas por la chimenea cada Nochebuena, mientras que otros se decantan por la tradición de esperar a la noche del seis de enero para dar la bienvenida a los Reyes Magos que llegan del lejano Oriente. Cada opción tiene sus ventajas por eso. Te mostramos de dónde vienen y cuáles son sus poderes.

Papá Noel: ¿quién es y cuál es su origen?

Papá Noel, Santa Claus o San Nicolás son solo algunos de los nombres con los que se conoce popularmente a este personaje tan legendario de la cultura occidental que lleva regalos a todos los niños la noche del 24 al 25 de diciembre. En nuestro país se dio a conocer gracias a una campaña publicitaria de una conocida marca de refrescos en 1963 que protagonizó este personaje, llevándole a la fama mundial.
Aunque son varias las teorías sobre su origen, algunas lo sitúan en Turquía en el año 280 d. C. o lo vinculan al dios romano Saturno, lo cierto es que la más conocida y actual sitúan su nacimiento en Europa, concretamente en Finlandia. Junto a la señora Claus y multitud de duendes ayudantes, fabrica todos los juguetes y regalos que los niños del mundo le han pedido a través de sus cartas. La noche del 24 se embarca con su saco cargado de regalos en un trineo junto a sus renos, con Rudolph a la cabeza, para repartir la ilusión de todo un año en millones de hogares.
Pero lo más característico de Papá Noel sin lugar a dudas es su aspecto, caracterizado por su traje y gorro rojo, su larga barba blanca y su aspecto campechano y bondadoso.

Los Reyes Magos llegan de Oriente

Cuenta la tradición cristiana que unos magos llegados de Oriente acudieron al nacimiento de Jesús de Nazaret para rendirle homenaje y entregarle regalos de gran carga simbólica: oro, incienso y mirra. Se trata de la creencia más popular en España debido a su vinculación religiosa. Aunque hoy lo sabemos todo acerca de Melchor, Gaspar y Baltasar, no fue hasta el siglo XV cuando se les dotó de nombre e imagen ya que en las primeros escritos apenas de ofrecían datos acerca de los magos. Cada uno de ellos representa a una de las tres razas más comunes de la época: los europeos, los asiáticos y los africanos.
Es a partir del siglo XIX cuando en nuestro país comenzó a afianzarse la tradición de convertir la noche de Reyes en una gran fiesta llena de magia para los más pequeños, siguiendo la tendencia de lo que ya venían haciendo otros países. La tradición establece que los niños deben enviar una carta a sus majestades pidiéndoles aquello que quieren y por qué merecen recibirlo. Así, la noche del 5 de enero los más pequeños dejan su zapatilla junto al árbol de Navidad antes de irse a dormir para que los tres magos sepan a quién deben dejarle cada regalo. Al despertar por la mañana, los niños corren hacia el árbol para ver si los Reyes Magos han cumplido sus deseos, excepto para los niños que han sido malos, a los que traerán carbón.
Como vemos ambas opciones están muy arraigadas ya a la cultura navideña española. Mientras que los Reyes Magos es la opción más tradicional, Papá Noel ha ido ganando terreno en estas últimas décadas. Aunque hay quien prefiere pedir regalos en ambas fechas, muchos de nosotros siempre hemos sentido más ilusión por alguno de ellos en especial. Y tú, ¿de quién eres?