De enero a septiembre de 2023, se produjeron algo más de 62.000 robos con fuerza en domicilios, según datos del Balance de Criminalidad del Ministerio del Interior. Esto es, cerca de 10 delitos cada hora. Cifras preocupantes si la comparamos, por ejemplo, con los 54.310 casos reportados dos años atrás. Por ello, incluso si vives de alquiler, necesitas proteger tus pertenencias, asegurar el contenido, ya que el casero no se responsabiliza por ellas.

El robo con fuerza se produce cuando los ladrones dañan la propiedad para acceder o salir de la misma. Si te intimidan o lesionan, se trata de un robo con violencia. En cambio, si logran apropiarse de tus bienes debido a un descuido o negligencia de tu parte, es un hurto.

¿Qué es un seguro de contenido para inquilinos?

Un hogar, más allá de sus elementos físicos como suelo, tejado y paredes (el continente), se define por lo que albergamos en él: nuestras pertenencias (el contenido).

La póliza de hogar es un producto diseñado para cubrir los principales riesgos a los que se expone una vivienda, desde un robo con fuerza hasta la rotura de una tubería o una inundación. No obstante, el alcance de sus coberturas depende del nivel de protección por el que nos decantemos.

Como arrendatario, debes saber que tus bienes no suelen estar amparados por la póliza del casero, por lo que, si quieres salvaguardarlos, necesitas un seguro de contenido, o en su lugar, una póliza de hogar que además de cuidar el contenido de tu vivienda, cubra todas tus necesidades como inquilino.

El seguro de contenido protege básicamente todo lo que se encuentra dentro de la vivienda. Desde los muebles, los electrodomésticos y otros enseres, hasta tus efectos personales y los del resto de las personas que viven contigo o dependen de ti. También resguarda los objetos de valor especial, como las joyas, antigüedades u obras de arte, aunque tendrás que declararlos de manera independiente.

Los cuatro grandes beneficios que aporta un seguro de contenido

Como inquilino, no estás obligado por ley a contratar un seguro de hogar, pero es aconsejable si quieres ganar seguridad ante los diferentes imprevistos que pueden producirse en el piso.

1. Tranquilidad mental. Probablemente habrás dedicado mucho tiempo, energía y dinero en amueblar, decorar y adquirir artículos personales como ropa y dispositivos electrónicos. Con una póliza de contenido, podrás relajarte sabiendo que tus posesiones están a buen recaudo.
2. Protección económica. Una casa se convierte en un hogar, entre otras cosas, por las pertenencias que atesora. Si se produce un siniestro, la aseguradora asumirá los gastos para que puedas reponerlas, de manera que su pérdida no represente un golpe para tu bolsillo. Santalucía va un paso más allá: con Hogar Premium también estarás cubierto si te atracan fuera de casa o usan indebidamente tus tarjetas en caso de robo o extravío, entre otras interesantes coberturas para tu día a día.
3. Precio más bajo. Como regla general, es más económico contratar un seguro de contenido que una póliza multirriesgo, ya que solo cubre tus bienes. Dado que la suma asegurada es menor y la extensión de los daños más limitada, suele ser la opción más barata, aunque debes evitar caer en una situación de infraseguro o sobreseguro a la hora de asegurar los enseres y objetos de valor que figuren en el inmueble.
4. Inmediatez. Otra ventaja adicional de contratar un seguro de hogar para inquilinos es la autonomía. Si se produce un incendio o algún daño por agua, por ejemplo, la aseguradora te ofrecerá una solución rápida. Así no tendrás que esperar a que el propietario gestione todo. Por tanto, este tipo de póliza solo te brinda tranquilidad al salvaguardar tus posesiones y responsabilidad civil, sino también celeridad y prontitud para que todo se resuelva lo antes posible y puedas seguir con tu vida sin preocupaciones.

Sin embargo, este producto también entraña algunas restricciones que debes conocer para decidir si es la alternativa más adecuada para ti.

Las desventajas de asegurar únicamente el contenido

El seguro de contenido para inquilinos brinda una cobertura restringida.

El principal inconveniente de este tipo de contrato es que sus garantías son bastante limitadas, pues se enfocan fundamentalmente en los daños que podrían sufrir los bienes y enseres personales, dejándote desprotegido ante otros riesgos no cubiertos por el seguro muy costosos.

Recuerda que, como inquilino, eres responsable por los daños que causes en la vivienda, según el artículo 1563 del Código Civil. A menos que puedas demostrar que no has tenido la culpa. Por consiguiente:

• si dejas abierto un grifo e inundas el piso del vecino,
• provocas un incendio
• o sobrecargas la instalación eléctrica,

la aseguradora no se hará cargo de los problemas y es probable que tengas que desembolsar una buena suma.

La responsabilidad civil es la obligación legal de reparar o compensar los daños materiales o personales causados a un tercero.

Por ese motivo, contratar únicamente un seguro de contenido no suele ser la opción más conveniente, sobre todo teniendo en cuenta esa restricción de coberturas para hipotéticas contingencias de las cuales seas responsable directo. Nada mejor, pues, que conocer al detalle las garantías que ofrece cada producto de hogar y comparar entre distintas modalidades para elegir aquella que encaje con tus intereses y necesidades.

Coberturas más amplias para disfrutar de una seguridad total

Una póliza más completa te brindará toda la tranquilidad que necesitas.

Con Santalucía tienes la posibilidad de suscribir un seguro de hogar a tu medida, con todas las ventajas que comporta, optando por las garantías básicas que protegen el contenido por hurto y robo, vandalismo y daños malintencionados, o incluyendo coberturas complementarias para una mayor protección:

• Responsabilidad civil por daños a la vivienda. Un accidente lo tiene cualquiera, pero con esta caución, la aseguradora se hará cargo de las reparaciones, la indemnización a los perjudicados, tu defensa y el pago de los gastos judiciales o extrajudiciales correspondientes. Santalucía cubre los desperfectos en la vivienda alquilada por incendio, explosión o derrame de agua y soluciona los problemas que tú o quienes vivan contigo puedan ocasionar de manera no intencional a un vecino, alguien ajeno a la propiedad o sus bienes y efectos personales.
• Protección jurídica. Si te ves involucrado en un procedimiento judicial, administrativo, arbitral o de mediación, no tendrás que preocuparte por los gastos y las reclamaciones que puedan surgir. Recibirás asesoramiento legal especializado y protección ante cualquier conflicto con tu casero derivado del contrato de arrendamiento. Y si necesitas reclamar daños materiales a los bienes asegurados, también tendrás asistencia.

Las coberturas para el arrendatario incluyen, además, asesoramiento telefónico ilimitado, defensa ante reclamaciones contractuales y servicios para la obtención de documentación.

En resumen, es posible que el seguro para arrendatarios suponga un pequeño esfuerzo económico adicional para la mayoría de las familias, pero a la larga vale la pena. Conocer las garantías que puede incorporar te permitirá sacarle el máximo partido y podrás personalizarlo para disfrutar del nivel de protección que necesitas, ajustado a tu presupuesto.

Protege lo que más valoras cuando vives de alquiler con el seguro de hogar para inquilinos de Santalucía. ¡No arriesgues todo lo que has conseguido!