Si tienes un gato o un perro, este titular no te va a sonar raro, ya que al igual que las personas los animales también tienen manías que desde nuestro punto de vista nos pueden parecer extrañas. ¿Quieres conocer de qué tipo de manías estamos hablando? Sigue leyendo…

Las manías de los gatos

Los gatos, como ya hemos dicho en otras ocasiones, son animales muy independientes, pero les gusta mucho llamar la atención de sus dueños con pequeñas travesuras. Y es que los gatos necesitan muchos mimos y cariño, eso sí, cuando ellos quieren.

Otra de sus manías más características es su obsesión por amasar. Este movimiento lo realizan cuando son pequeños para tomar la leche de su madre y luego de adultos lo repetirán, ya que les aporta una sensación de bienestar y relajación.

Las cajas y los lugares pequeños y cerrados son su debilidad. Esta manía viene de su afán por sentirse seguros y protegidos porque, aunque parezca una tontería, los gatos dentro de espacios muy reducidos se sienten a salvo.

Un movimiento muy habitual en todos los felinos consiste en frotarse con sus dueños. Lo hacen para marcar su propiedad. Al ser la persona que le da de comer y le cuida, lo marcan para no que venga otro gato y se apropie de su dueño.

A veces cuando se acaricia al gato este se revuelve y termina poniendo su trasero en tu cara. Si no lo sabes interpretar puede parecerte un mal gesto, pero nada más lejos de la realidad. Si tu gato te pone su trasero en la cara quiere decir que eres una persona de su total confianza.

Las manías de los perros

Que tu perro esconda la comida puede ser todo un incordio. Esta manía viene de su instinto de supervivencia y lo realizan para tener comida en época de escasez.

Algunos perros tienen la manía de esconder objetos en agujeros que cavan previamente en la tierra. Esta manía está muy relacionada con la de esconder comida y la realizan por la necesidad de disponer de comida y objetos por si lo necesitan en un futuro.

Es habitual ver a los perros dar vueltas antes de tumbarse. ¿Por qué? Principalmente lo hacen para acomodarse y verificar que no existe nada que les pueda molestar.

Suele ser habitual ver a los perros sacar la cabeza por la ventanilla del coche, la razón, a los perros les encanta la cantidad de olores que pueden percibir en el camino y la brisa fresca que reciben en la cara al estar fuera del coche.

Una manía que comparten casi el 100 % de los canes es oler el trasero de otro perro. Aunque a nosotros nos parezca algo desagradable, ellos lo hacen para conocer al otro animal. A través de los olores pueden saber lo que han comido, el estado emocional en el que se encuentran y su género.

¿Conoces alguna otra manía curiosa de tu mascota? Cuéntanosla y comparte tu experiencia con nosotros.