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Llegan las vacaciones y con esto el cambio en nuestra rutina. Tenemos más tiempo, nos relajamos, queremos descansar. Viajar y aprovechar a disfrutar de estos días. Sin embargo, surgen preguntas: ¿cómo ha de ser mi dieta? ¿Tengo que modificar los hábitos? ¿Qué hago si no voy al gimnasio? Existen varios factores que hay que tener en consideración, y todo esto dependerá de lo que hagas en vacaciones y tus planes de verano.
Hay que recordar que uno o dos días poco saludables no arruinan tu estilo de vida por completo. Recuerda que es el cómputo total de lo que haces, lo que de verdad importa. El verdadero problema aparece cuando excedemos estos límites. Cuando estas vacaciones nos regresan a nuestras viejas costumbres y olvidamos por completo nuestros hábitos saludable.
Te dejamos 5 consejos para poder llevar un estilo saludable y mantener tus hábitos en vacaciones:

1. Hidratación

Es fundamental mantener un adecuado estado de hidratación. Recuerda siempre salir con una botella de agua para poder mantenerte hidratado durante el día. Esto hará que te sientas mucho mejor, te ayudará a refrescarte y a evitar la fatiga.

2. Mantente en movimiento

Mientras puedas, no dejes de moverte. Hay que mantener el cuerpo activo para el buen flujo sanguíneo de todos los órganos y músculos, además de mantener tu metabolismo en activo.
Si estás esperando un vuelo, un tren o un autobús, no te sientes, pasea a buen ritmo por la terminal y sáltate las cintas y ascensores si es posible.

3. Consumir frutas y hortalizas de temporada

En esta época encontramos abundancia de frutas y hortalizas que, además de hidratarnos, son muy bajas en calorías. A media mañana y a media tarde son buenos momentos para tomar piezas de fruta o porciones de sandía o melón que, aunque tengan un sabor muy dulce, tienen un bajo aporte de azúcares.

4. Olvídate del “todo o nada”

Al viajar cambian nuestros horarios. Por eso, la clave es fluir con las nuevas horas y encontrar momentos para dar cabida a hábitos saludables. Esto requiere flexibilidad e implica adaptarnos al espacio y tiempo que tengamos, en vez de renunciar a ello directamente.
No tienes que realizar tus rutinas completas, puedes dedicarle unos minutos de tu tiempo a realizar ciertas actividades. Puedes hacer ejercicios en casa, pasear por la playa, realizar yoga, meditar, o salir a correr. Esto te ayudará a compaginarlo todo sin estrés y sentirás que no te alejas demasiado de tu vida sana.

5. Sal con snacks

Tener un snack preparado para momentos de necesidad puede ayudarte a no desviarte más de lo que quieres y poder seguir disfrutando de tus vacaciones. Lo primero, es salir de casa con pequeños snacks sanos a los que recurrir cuando te entre el hambre, en vez de tener que buscar algo bueno en tiendas de paso. ¿Ideas? Barritas nutritivas, granola, nueces y frutos secos, kale, chips. Las frutas también son una muy buena opción.
 

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