Desde hace algún tiempo se han popularizado las dietas veganas y vegetarianas por múltiples razones. Algunas de ellas son por motivos animalistas, cuestiones sobre los derechos de los animales y el sufrimiento de éstos; otras motivaciones en cambio son de origen medioambiental, la sostenibilidad de la producción o la contaminación de las industrias. Lo cierto es que ya sea por la empatía hacia los animales o por las preocupaciones sobre el futuro de nuestro planeta, el vegetarianismo y veganismo ya forman parte de nuestra cultura y cada vez se ven más opciones en restaurantes que facilitan a las personas que lo practican en su día a día.
La dieta vegana es mucho más sencilla de comprender y definir, las personas que llevan una dieta vegana no consumen ningún tipo de alimento que tenga origen animal. En cambio, la explicación de la dieta vegetariana es más compleja puesto que no hay un solo tipo sino que cada persona puede elegir libremente hasta qué punto implicarse. Suele pensarse que la dieta vegana es una versión estricta de la dieta vegetariana. En líneas generales la dieta vegetariana significa no comer carne, aunque dentro de esta reflexión hay vegetarianos que deciden no comer tampoco pescado o no comer huevos. Los productos de origen animal como la leche o el queso suelen permitirse en una dieta vegetariana, pero hay quién a pesar de ello decide no tomarlos. 
Entendido esto debemos saber que hay distintos tipos de vegetarianismo, por ejemplo:

• Apivegetarianos: Consumen miel, aunque suelen preocuparse porque sea producida de manera sostenible y en granjas locales.
• Ovovegetarianos: No consumen leche ni ningún otro derivado lácteo, pero si toman huevos. Igual que antes estos también se preocupan por el origen de estos y prefieren las granjas ecológicas.
• Lactovegetarianos:  Es lo contrario al anterior caso, sí consumen lácteos, pero no huevos.

Por otro lado, debemos tener en cuenta que quizás la mayor diferencia entre estos dos tipos de dieta es el alcance de cada una. Mientras la dieta vegetariana suele limitarse al aspecto nutricional, la dieta vegana va mucho más allá que los alimentos que se consumen, la dieta vegana es también un estilo de vida. Los veganos evitan el uso de cualquier material de procedencia animal, no solo los alimentos, evitan también el cuero, la seda o el ante en la ropa. Por otro lado, rechazan los productos cosméticos que tenga algún componente de origen animal o que haya sido testado en animales para su aprobación. 
Existe la creencia popular de que el veganismo es el tipo de dieta más saludable que existe, se cree que mejora la salud mental, previene de enfermedades, controla a nuestras hormonas incluso tiene beneficios para nuestra salud dental. Lo cierto es que los expertos tienen opiniones encontradas al respecto. En cualquier caso, si estás pensando en hacer algún tipo de cambio drástico en tu dieta no olvides llevar un seguimiento médico.