Si a ti también te cuesta distinguir si tienes un simple catarro o por el contrario estás incubando una gripe, hoy vamos a ver las diferencias entre ambas.  
Un catarro o un resfriado es una infección leve de la nariz y garganta que puede estar causado por alguno de los miles virus existentes, en cambio la gripe es una infección de las vías respiratorias causada por un virus en concreto, el virus influenza.
Como diferencia entre las dos también está la estacionalidad. La gripe por ejemplo comienza a finales de noviembre y suele terminar a principios de primavera, mientras que un catarro puede aparecer a lo largo de todo el año.

Los síntomas también varían de una enfermedad a otra como os vamos a explicar a continuación:

Síntomas de un resfriado:

• Congestión nasal, dolor e irritación de garganta
• Ojos llorosos
• Febrícula (entre 37,5 y 37,9 grados centígrados)
• Duración entre 2 y 5 días

Síntomas de la gripe:

• Malestar generalizado
• Fiebre (de 38 grados centígrados en adelante)
• Tos seca
• Dolor muscular y articular, sensación de cansancio y dolor de cabeza
• Duración entre una semana y quince días

Una vez distinguidos los síntomas llega la hora de tratar la enfermedad. Los tratamientos para la gripe o para un catarro común son completamente diferentes.
Por un lado, si notamos los síntomas de la gripe lo mejor es acudir al médico de cabecera para que nos recete un antigripal adecuado a nuestras necesidades (analgésicos, antipiréticos, descongestionantes y antihistamínicos), ya que a cada persona le puede atacar el virus de manera diferente.
Por otro lado, para combatir el resfriado lo más adecuado es tomar paracetamol para intentar paliar los síntomas. No hay necesidad de tomar medicamentos más fuertes.
Tanto la gripe como el resfriado se curan con el tiempo, en el momento que nuestro cuerpo se limpia de virus. El paracetamol o los antigripales son para aliviar los síntomas de ambas enfermedades que se deben combinar con el reposo y la ingesta de líquidos. En ningún caso se debe tomar un antibiótico, ya que estos solo están indicados para enfermedades producidas por una bacteria por lo que al virus no le estaría haciendo nada.
Si después de leer este post todavía tienes dudas sobre el tratamiento que mejor te iría, te recomendamos que acudas a un especialista.
¡Cuídate este invierno!