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Si estás leyendo esto es porque, en algún momento, te has planteado hacer una rutina de deporte y no has llegado a hacerla, sea por el motivo que sea.
Realmente lo que nos cuesta no es empezar a hacer deporte. Todos hemos ido por primera vez al gimnasio y hemos pagado la matrícula para luego ir solo la primera semana, o hemos salido a correr dos días seguidos y ya. Pero, a medio y largo plazo, lo que verdaderamente cuesta es crear y mantener una rutina.
¿Qué podemos hacer para crear una rutina?
Define tus objetivos
Lo primero que debes hacer es tener claro cuáles son tus objetivos y cómo vas a cumplirlos, es decir, la metodología que vas a seguir.
Para elegirlos, debes ser realista. Si acabas de empezar a hacer deporte, deberás establecerte unos objetivos bajos y realistas que puedas cumplir para entonces avanzar al siguiente objetivo. También tienes que centrarte en cuál es tu meta: ¿ganar fuerza? ¿resistencia? ¿llevar una vida más saludable?
Avanza paso a paso
No pretendas conseguir todos tus logros el primer día. Hacer deporte implica una rutina de ejercicio que debes mantener en el tiempo e ir aumentando a medida que avanzas en los ejercicios.
No te desmotives por no llegar el primer día, intenta fijarte pequeños objetivos que puedas ir cumpliendo.
Ayúdate de un recordatorio para tu rutina
Para que sea una rutina, es recomendable que sea siempre en la misma franja horaria. Por eso, te recomendamos que establezcas algunos recordatorios, no solamente en tu móvil sino en tus hábitos (por ejemplo, siempre después de desayunar y antes de ir al trabajo).
Recompénsate por tus logros
Lo has conseguido y eso debes recompensártelo. A medida que sigues con tu rutina de deporte, ve recompensándote por el ejercicio que has hecho y eso te motivará a continuar.
Analiza tus resultados y corrígelos
Y, por último, analiza si estás consiguiendo lo que querías. En caso de que no lo estés consiguiendo, replantéate los anteriores pasos y, si aún así no lo consigues, puedes contactar con un entrenador que te ayude.

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