Desde hace ya bastantes años somos conscientes de la importancia de protegerse del sol, sobre todo en verano. La piel y los ojos son los puntos más delicados en esta lucha contra los efectos adversos del sol. Gracias a las campañas de prevención y a los anuncios de televisión, tenemos muy interiorizado el utilizar un factor de protector alto para cuidarnos de la piel, pero ¿hacemos lo mismo con los ojos?
Hoy queremos hablarte de la importancia de proteger la vista durante el verano desde la infancia.

Por qué utilizar gafas de sol siendo niño

• Son más sensibles

Los ojos de los niños son más sensibles a la radiación UV y su cristalino deja pasar más rayos UV que los de un adulto. A la larga puede ser perjudicial como explicaremos en el siguiente punto.

• Además, los niños en verano suelen pasar mucho tiempo en la calle realizando actividades en el exterior, por lo que recibirán una mayor radiación.
  La exposición se acumula 

La exposición prolongada al sol puede provocar la aparición de cataratas, así como, en los casos más graves, tumores en los párpados. Por este motivo, es casi obligatorio el proteger los ojos de los niños de la exposición al sol.
Lo mejor para proteger los ojos del sol es utilizar gafas de sol, aunque también se pueden utilizar gorros o viseras que den sombra en los ojos.

Cómo deben ser las gafas

Es muy importante que protejas los ojos de los más pequeños con gafas adaptadas a sus necesidades.

1. Material: debe ser cómodo y elástico para adaptarse a todos los juegos de los niños. Si el pequeño no está cómodo con las gafas mientras juega, no querrá utilizarlas. A la vez, deben ser resistentes y seguras para que puedan con el ritmo de los niños y no se rompan fácilmente.
2. Diseño: además de los materiales, el diseño es muy importante. Las gafas infantiles deben proteger el ojo desde casi todos los ángulos. Además, deberán apoyar bien en la nariz.
3. Homologadas: es muy importante utilizar gafas de sol que cumplan con la normativa europea correspondiente a este producto. Para saber si están homologadas basta con ver la marca CE.
4. Cristales: los cristales además de estar homologados deben ser de color marrón, ya que este tono protege mejor los ojos de los niños frente a los rayos del sol al absorberlos con más facilidad.

Últimos consejos

Si este verano tienes que hacerte con unas gafas de sol para tu hijo, queremos darte unos últimos consejos.

• Antes de comprar ningún tipo de gafa se debe probar. Comprueba que el puente de la nariz es el correcto para que la gafa no se caiga fácilmente.
• Añade a tus gafas una cinta o elásticos en la patilla para que el niño no pierda las gafas a la primera de cambio.
• Para los niños el índice de protección recomendado es el 3 (fuerte). Por debajo de este no es recomendable comprar gafas para los niños, ya que permiten pasar demasiada luz.

Ya estás preparado para comenzar un verano más seguro.