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Cualquiera de nosotros ha escuchado en muchas ocasiones que los alimentos procesados no son buenos para la salud, que debemos disminuir su consumo y sustituirlo por alimentos frescos y naturales como las frutas, verduras, carnes, pescados…

Qué se considera producto procesado

Cualquier producto que conlleve una elaboración o modificación de sus propiedades en la industria alimentaria se considera un alimento procesado.
La ventaja de estos productos es que pueden ser consumidos en el acto y no necesitan ningún tipo de elaboración previa por parte del consumidor. Esto unido a la gran cantidad de aditivos hacen que se vuelvan adictivos para las personas y quieras siempre comer más.  

¿Por qué no se debe abusar de este tipo de alimentos?

Al procesar cualquier alimento pierde gran cantidad de sus propiedades nutricionales y se le añaden otras sustancias artificiales, aditivos, nada beneficiosas para nuestra salud que no aportan ningún nutriente a nuestro organismo.
Algunos de los más utilizados son:

  • Colorantes: Para saber qué tipo de colorantes lleva cada producto, basta con fijarse en la etiqueta y comprobar las sustancias que comienzan con “E-“ que llevan. Algunos de ellos son altamente perjudiciales para la salud.
  • Conservantes: Como su nombre indica se utilizan para conservar las propiedades físicas y nutricionales de los alimentos procesados. Con ellos se pretende evitar que se deterioren y duren más. Muchos de ellos, al igual que los colorantes, vienen indicados en las etiquetas con la letra “E” seguida de un número.
  • Potenciadores del sabor: Este tipo de sustancias se le añaden para ganar en aroma y sabor. Una de las más utilizadas es el glutamato monosódico.

Pero estos son solo los aditivos más utilizados, pero existen otros muchos como los correctores de acidez, los espesantes, reguladores del pH, etc.  

Sus efectos negativos

Enfermedades 
Son muchas las enfermedades que se asocian a una alimentación basada o con exceso de productos procesados. Algunas de las más conocidas son:

  • Diabetes. Estos productos provocan en nuestro organismo picos de azúcar en sangre que obligan al páncreas a crear insulina más rápidamente, pero luego estos niveles caen por debajo de los normales lo que nos lleva a querer comer de nuevo y pasamos al siguiente punto.
  • Obesidad: Los alimentos procesados contienen gran cantidad de azúcar y, como decíamos antes, aportan menos o ningún valor nutricional a nuestro organismo, pero sí nos hacen ganar peso. La mayor parte de estos alimentos aportan lo que se conoce como calorías vacías.
  • Problemas cardíacos: Uno de los efectos negativos de estos alimentos es la obstrucción de las venas y arterias, lo que puede derivar en problemas cardíacos.
  • Envejecimiento prematuro: Un exceso de azúcar en nuestro organismo acelera el proceso de envejecimiento, afecta a la elasticidad de la piel y provoca la muerte prematura de muchas células.

Adicción 
Un consumo excesivo de azúcar, sal y aditivos causa adicción. La prueba la tienes en que en muchas ocasiones no eres capaz de comerte solo una patata frita o una galleta, sino que vas a querer más.

¿Existen los alimentos procesados saludables?

Como en todo siempre hay un lado bueno y es que no todos los productos procesados son perjudiciales para la salud, existen algunos que se pueden considerar saludables, entre ellos se encuentran:

  • La leche: Es un producto elaborado que consumimos habitualmente.
  • Legumbres en bote o congeladas: Este tipo de productos además de facilitarnos su elaboración no son perjudiciales para la salud. La elaboración que tienen detrás es la propia de la cocción. Si se debe huir de legumbres ya preparadas o con salsas.
  • Pastas integrales: La mejor elección de pasta es la integral, se recomienda no consumir en exceso las que provengan de harinas refinadas o los platos ya preparados de pasta.
  • Pescados envasados: El pescado es mejor consumirlo fresco, pero en ocasiones será inevitable consumirlo congelado o envasado.
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