La rutina determina nuestra forma de vida y, a veces, por falta de motivación o cansancio, renunciamos a actividades que, en gran parte, nos benefician. El ejercicio es una de ellas.
Sin embargo, existen diferentes formas de encontrar el motor que nos impulse en esta búsqueda de una vida sana; hacer ejercicio con la compañía de tu mascota es una buena forma de mejorar la salud de ambos.
Correr
O caminar, si alguno de los dos no está en condiciones de hacerlo; hay razas que están más capacitadas para esta forma de ejercicio. En cualquier caso, la clave es comenzar poco a poco y, gradualmente, aumentar el ritmo, siempre teniendo en mente cuáles son los límites de ambos.
Patinar
Es una forma de ejercicio que sólo se recomienda a aquellos que tengan seguridad sobre ruedas, ya que tu mascota puede desviarse del camino sin previo aviso. Es importante también que tengas la certeza de que va a seguirte durante el trayecto.
Agility
Es una forma de ejercicio apta para ti y para tu perro. Consiste en una pista de obstáculos en la que ambos podréis correr o saltar, entre otros, ejercitando, de esta forma, diferentes músculos. Eso sí, no olvides nunca cuál es la condición física de tu mascota.
Ciclismo
¡Tranquilo! No tienes que montar a tu perro en una bicicleta, pero sí puedes pasear junto a él. Es recomendable que realices descansos cada cierto tiempo; recuerda que tiene que hacer sus necesidades y que, durante el trayecto, gastará más energía que tú en bicicleta.
Doga
Se trata de una disciplina en la que haces yoga con tu perro, siempre y cuando éste no sea demasiado activo como para hacerlo. Puedes encontrar vídeos con ejercicios para ambos en Internet.
 
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