El concepto de salario emocional, vinculado a esas otras expectativas de los trabajadores que trascienden lo económico, no ha irrumpido de repente en el mundo laboral. Eso sí, la aparición del coronavirus en nuestras vidas ha acelerado su popularidad. La imposición de modelos de trabajo flexible, gracias a los avances tecnológicos, será una de las claves del futuro laboral inminente. Estamos viendo cómo este sistema favorece la conciliación, entre otros beneficios. ¿Y cómo será ese nuevo escenario cuyas bases ya se están acomodando en la sociedad? Te lo contamos con detalle.

El teletrabajo flexible y las oficinas

Los expertos aseguran que este modo de desempeño aumenta la productividad del empleado hasta en un 20 %. Este incremento se sustenta en la necesidad del individuo de equilibrar su vida personal y profesional mediante la optimización de su tiempo. Solo mediante la libertad para ejecutar sus tareas conseguirá su bienestar pleno, situación que estimulará su rendimiento. En este contexto surgen las políticas de trabajo flexible, un concepto cada vez más arraigado que marcará el presente y el futuro laboral en la próxima década.

El trabajo inteligente pasa la prueba

Hasta la crisis del coronavirus resultaba necesaria una revolución en la práctica de estos sistemas. No obstante, en las circunstancias actuales el trabajo inteligente ya ha sido puesto a prueba.
La transformación está en marcha, y hoy podemos decir que numerosas pymes y pequeños comercios que hasta hace poco no estaban preparados para este cambio han asumido el reto, digitalizándose y afrontando una nueva realidad. Ya sea en su totalidad o parcialmente, muchas empresas han instaurado ya el teletrabajo.

Espacios más flexibles en las oficinas

Las condiciones flexibles no van a circunscribirse a trabajar en casa y a celebrar reuniones a través de videollamadas. Aquellas compañías que opten por alternar el trabajo en el hogar con la asistencia a la oficina, incluso aquellas que se vean obligadas por la naturaleza de su sector a mantener sus hábitos, idearán entornos laborales más inspiradores y espaciosos para sus departamentos acudiendo a las oficinas flex, donde se confeccionarán lugares de trabajo privados.
Te hablamos de centros de trabajo evolucionados en los que la empresa decide cuántos metros necesita y cómo los distribuye. Zonas de descanso, puestos de coworking, contratos más cortos para las empresas… Este panorama presume una mayor flexibilidad tanto para los equipos como para la empresa, que asume menos riesgos.

Tendencias que se unirán a la flexibilidad laboral

El futuro del mercado laboral en estos próximos años estará marcado por el incremento de la creatividad a cargo de los trabajadores y empresarios. Esto será posible gracias a la inteligencia artificial, pues las máquinas asumirán las tareas mecánicas y favorecerán la toma de decisiones. Asimismo, se tendrán en cuenta las habilidades blandas como la empatía de los candidatos a la hora de reclutar talento.
Como ves, el trabajo flexible ha llegado para quedarse. La tendencia que se está instaurando en los mercados laborales y que se impondrá a lo largo de la próxima década proporcionará beneficios a trabajadores y a empresas.