La Semana Santa es una época de desplazamientos por carretera. Por este motivo, es importante que se adopten ciertas medidas de seguridad para el viaje y así, preocuparnos solo por disfrutar durante estos días.  

Antes del viaje

“Hombre precavido, vale por dos” así que ya sabes, organiza tu viaje con tiempo.

• Planificar los horarios. Tanto si viajas de día como de noche, planifica los horarios de salida y calcula el tiempo que te llevará llegar a tu destino, incluyendo las paradas que realizarás.

No vayas con prisas. El trayecto es parte de las vacaciones, así que disfrútalo.

• Hacer una lista del equipaje. No dejes para el último día las maletas. Planifica el equipaje que llevarás en el coche para asegurarte que todo entra en el maletero perfectamente.
• Comprobar el tráfico y el estado de las carreteras. Antes de salir comprueba el estado de las carreteras: obras, temporales de lluvia, viento, nieve, previsión de atascos en tramos de mucha afluencia, vías alternativas… Estudia bien todas las posibilidades que tienes antes de comenzar el viaje.
• Comprobar el estado del vehículo. Antes de cualquier viaje se debe revisar el estado del vehículo: neumáticos, líquidos, frenos, filtros, amortiguadores…todo es poco cuando hablamos de seguridad al volante.
• Prepara la documentación. No te olvides de llevar contigo toda la documentación que puedas necesitar: reservas de alojamientos o actividades, documentación de cada uno, seguros en vigor…
• Consulta las contraindicaciones de medicamentos. Si estás tomando algún tipo de medicamento, antes de comenzar el viaje consulta en el prospecto si tiene alguna contraindicación.

Durante el viaje

• Evitar comidas copiosas 

Antes o durante un viaje largo no se deben tomar comidas pesadas que nos puedan provocar sueño o ralentizar nuestros reflejos. Lo ideal para este tipo de ocasiones es realizar comidas ligeras y frecuentes.

• Hidratarse durante el viaje 

Durante el viaje no olvides hidratarte, bebe agua cada poco y consume alguna bebida azucarada que aporte energía a tu cuerpo para activarlo.

• Realizar descansos cada dos o tres horas 

En los viajes largos es importante que no estemos cansados y que se mantengan los niveles de atención alerta. Por este motivo, la recomendación es realizar paradas cada dos o tres horas.

Olvídate de querer realizar el viaje del tirón. Para con frecuencia, estírate y aprovecha para comer y/o refrescarte.

• Realiza una conducción suave y relajada 

Olvídate de las prisas o de conducir de manera violenta. Al volante vete tranquilo, respetando todas las señales de tráfico y al resto de conductores.

 Comienza las vacaciones disfrutando del trayecto.