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Sin emisión de gases contaminantes, ahorro en el mantenimiento… son muchos los factores que motivan a los conductores a la hora de comprar un coche eléctrico. Si tú también lo estás pensando o sientes curiosidad por conocer cuáles son las ventajas de estos automóviles, que han llegado para quedarse, aquí tienes unas cuantas:

  • Cero gases  

No emiten gases contaminantes, ni CO2, ya que durante su uso no hay combustión. Además suelen ser respetuosos con el medio ambiente también en su fabricación.

  • Menos averías  

Al no existir fricción en el motor, el desgaste es mucho menor. Lo que se traduce en una revisión final de filtros, aceite o baterías.

  • Mantenimiento sencillo 

Debemos poner especial atención en el mantenimiento de las baterías. Por lo demás, llevar un control de líquidos, filtros o aceite es más que suficiente. 

  • Conducción más cómoda  

No existen marchas ya que el coche entiende solo una velocidad. Cuando sumamos horas al volante, la ausencia de marchas y de ruido, harán la conducción mucho más cómoda.

  • Ventajas fiscales 

Los coches eléctricos reciben hasta un 75% de bonificación en el IVTM. Además existen muchos peajes los cuales se pueden utilizar de forma gratuita los días laborales.

  • Menos ruidosos 

Al no contar con un motor tradicional, el ruido es casi inexistente. A su vez, hay que mencionar que no emiten tanto calor como el resto de vehículos.

  • Exento en el impuesto de matriculación y rebajas en los seguros. 

Gracias a ser un coche con cero emisiones, los propietarios de estos vehículos quedan exentos del pago de matriculación y algunos tipos de seguros de coches son mucho más bajos.
¿Te has preguntado por qué se ven tan pocos? porque también existen algunos inconvenientes.

  • Vehículo con un coste elevado

A diferencia de los vehículos de gasolina o diésel, estos modelos tienen un coste bastante superior. Existen ayudas para financiarlos y a la larga, el consumo llega a compensar. Pero hay que tener en cuenta también que las baterías son caras y su recambio suele ser habitual.

  • La autonomía aún es baja 

En la actualidad, aunque se están llevando a cabo mejoras, la autonomía de estos coches está en torno a los 100-150 km por recarga. Además la recarga eléctrica puede llegar a durar horas, lo que hace que los viajes de larga distancia sean complicados.

  • Escasos puntos de recarga 

Existen pocos puntos de recarga y muy dispersos. No resulta fácil encontrar un estacionamiento de recarga y tampoco existe una aplicación específica para poder encontrarlos. Son los fabricantes los que proporcionan la ubicación.

  • Pocos talleres especializados 

En caso de quedarte tirado en una carretera muy apartada, no resultará fácil encontrar un taller especializado.

¿Coche eléctrico o híbrido?

La diferencia más notable se encuentra en el motor. El coche híbrido combina un motor de combustión con varios propulsores eléctricos. Al contrario que los eléctricos impulsados únicamente por baterías o pilas de combustible.
La segunda diferencia importante son las emisiones. El coche híbrido es menos contaminante que los coches que conocemos de diésel o gasolina, pero aquí es difícil compararlo con el eléctrico donde la emisión de gases es cero.
Seguro que dentro de pocos años la implantación de estos vehículos se irá normalizando, volviendo nuestras carreteras más limpias y menos ruidosas. ¿Te sumarías a esta nueva tendencia?

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