La sociedad es testigo de cada vez mayores avances tecnológicos, que tienen su reflejo en los más diversos sectores. Y eso también en el ámbito de los seguros, en el que desde hace un tiempo ha irrumpido con fuerza la tecnología blockchain. Es el momento de que te familiarices con este término y con su funcionamiento.

Cómo funciona blockchain

Antes de conocer cómo funciona blockchain, es necesario que viajes en el tiempo hasta comienzos de la década de los noventa. Fue entonces cuando vio la luz esta invención, obra de Stuart Haber y W. Scott Stornetta, que se basa en una cadena de bloques asegurados criptográficamente. En 2008 se popularizó de la mano del Bitcoin.
En la actualidad su desarrollo se liga a otros ámbitos económicos, como el empresarial y el financiero, donde está cobrando cada vez mayor importancia. Y no es de extrañar, dadas las garantías que confiere.
El blockchain es un registro de operaciones único, organizado mediante nodos, que ha sido consensuado por las distintas partes implicadas y que no puede ser modificado salvo si todas ellas se ponen de acuerdo para hacerlo. El nodo reúne copias exactas de diversas transacciones o registros, así como una vinculación con el nodo inmediatamente anterior y el nodo siguiente, formando una cadena. Por lo tanto, su posición es inamovible y su contenido inalterable.
¿Y cuál es su mayor beneficio? Pues que mejora la transparencia de las operaciones llevadas a cabo en la red, puesto que nadie puede borrar un determinado registro con información sobre un contrato o una compraventa. No existe posibilidad de cometer fraudes.

Blockchain y el mundo de los seguros

Esta nueva tecnología también juega un papel decisivo en el mundo de los seguros. Los expertos auguran que moverá cerca de 1.400 millones de dólares en el mencionado mercado de cara al año 2023, quedando de manifiesto un incremento porcentual superior al 80 % cada ejercicio.
Su mayor potencial se liga a los smart contracts o contratos inteligentes, basados en un código informático que ayuda a verificar y cumplir el contrato automáticamente. De este modo, no se precisa de la intervención de una tercera persona (ni de un humano) que vele por su cumplimiento. El que ese contrato de seguro y la información que contiene pasen a guardarse en un nodo no pone en riesgo su confidencialidad, ya que estos datos no se revelarán de no ser necesario, competiendo solo a las partes que lo firmaron.
Uno de sus mayores beneficios es la posibilidad de acelerar los trámites de un seguro, incluyendo las gestiones necesarias en caso de que se produzca un siniestro. Como consecuencia directa, se reduce el papeleo en el que suelen traducirse este tipo de situaciones y la experiencia del cliente mejora considerablemente. Y esta también puede mejorar al aplicarse reducciones en las primas derivadas del ahorro que conlleva la simplificación de los procesos que esta nueva tecnología comporta.
Lo cierto es que la tecnología blockchain puede traducirse en diferentes ventajas para ti. Comienza a disfrutar de ellas con la contratación de un seguro de vida, del hogar o de cualquier otro tipo.