Trabajo Freelance: beneficios y desventaja
El trabajo freelance representa una opción muy interesante para profesionales de los más diversos sectores. Desde el diseño gráfico al periodismo pasando por la fotografía, la educación y el campo financiero… La lista no tiene fin. Pero, antes de embarcarte en la aventura de trabajar por tu cuenta, descubre con nosotros cuáles son las ventajas y las desventajas de una decisión que debes meditar seriamente.
Los beneficios del trabajo freelance
Estos son los principales beneficios de los que disfrutarás si te conviertes en un profesional freelance. Presta atención.
- Dispondrás de flexibilidad de horarios para trabajar cuando lo desees. A diferencia de los empleados de una empresa, no tendrás que ceñirte a una determinada hora de entrada ni de salida, ni a turnos o relevos.
- Eres tu propio jefe, por lo que no tienes que rendir cuentas ante superiores ni tampoco esperar a las decisiones que estos tomen. Tú tienes la capacidad de decidir qué trabajo hacer y cómo hacerlo.
- Todos los beneficios económicos que obtengas como resultado de tu labor son tuyos, y no debes conformarte con una parte o un sueldo prefijado.
- Por lo general, si solo necesitas de un ordenador y una conexión a Internet, puedes trabajar desde el lugar que elijas. Tendrás la oportunidad de decantarte por las oficinas de tu propia empresa, el salón de casa o cualquier ciudad del mundo a la que desees viajar.
Las desventajas de ser trabajador autónomo
Es la otra cara de la moneda. Ser trabajador autónomo también conlleva desventajas que no debes menospreciar a la hora de dar este importante paso.
Para empezar, deberás hacerte cargo de una serie de pagos, como el de la cuota de la Seguridad Social, las facturas de la luz y el teléfono, la compra de material informático… La mayor parte de estos gastos son fijos y habrás de abonarlos todos los meses, incluso en aquellos en los que no obtengas beneficios.
En este sentido, además, has de tener en cuenta que los ingresos pueden ser inestables y que el disponer del volumen de trabajo necesario siempre dependerá de tu esfuerzo por encontrar nuevos clientes. Serás, por tanto, tu propio comercial. Del mismo modo, de ti depende hacer frente a los impagos de la clientela. ¡Y no has de olvidar hacerte con un seguro de salud para pymes!
Deberás ejercer control sobre distintos ámbitos de tu firma, como el administrativo, la gerencia, las relaciones públicas, las redes sociales, el buen ambiente en la oficina, la imagen corporativa… Esta multiplicidad de tareas no te dejará demasiado tiempo libre, así que es probable que conciliar vida laboral y personal sea más complicado de lo que lo era antes.
Además, olvídate de disponer de días libres o de asuntos propios, así como de vacaciones pagadas. Esa serie de beneficios sociales a los que están acostumbrados los empleados por cuenta ajena dejarán de existir para ti.
Ahora dispones de una visión más realista de lo que supone el trabajo freelance. Decide si realmente te interesa dar un giro de 180 grados a tu vida laboral y luchar por alcanzar las metas que te has marcado en tu carrera.