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En 2022, aproximadamente el 76 % de las viviendas españolas se encontraban aseguradas, registrándose un incremento del 4,7 % en el volumen de primas, según el informe de Seguros y Fondos de Pensiones del Ministerio de Asuntos Económicos. Ya sea por su obligatoriedad a la hora de suscribir una hipoteca o por la tranquilidad que ofrece, cada vez más propietarios e inquilinos deciden contratar una póliza. Sin embargo, con el paso del tiempo, muchos olvidan un detalle vital: realizar una revisión del seguro de hogar.

¿Por qué es fundamental repasar el condicionado?

El seguro es un producto en continua evolución que se va adaptando a los cambios socioculturales, legislativos y las necesidades de los consumidores. Sin embargo, no es menos cierto que existe una gran fidelidad por parte de los clientes hacia su compañía aseguradora: el 75 % mantiene el mismo contrato que firmó junto al préstamo hipotecario, de acuerdo con un estudio realizado por el Consejo General de Mediadores de Seguros.

Si no repasas sus garantías con regularidad (goteras, incendios, robos, asistencia en el hogar, etc.), es probable que queden obsoletas y no basten para cubrir los posibles daños que sufra el inmueble. Lo mismo pasa con sus límites y exclusiones. En cambio, actualizar la póliza te aportará diferentes ventajas:

1. Evitar caer en una situación de infraseguro o sobreseguro

Cuando aseguras tu casa, la compañía determina la prima en función de los valores de continente y contenido que has declarado. La mayoría de los contratos incluyen una cláusula de revalorización automática para actualizar el capital, teniendo en cuenta factores como las oscilaciones del costo de la vida, de manera que la vivienda quede cubierta adecuadamente. Con todo, esa modificación no incluye las obras que revaloricen el inmueble, por lo que, si has hecho cambios sustanciales, debes realizar una revisión del seguro de hogar para ajustar la suma asegurada y no perder protección. 

Del mismo modo, a la hora de fijar los límites económicos, es aconsejable que no incurras en una situación de sobreseguro. Al contario que el infraseguro, esta se produciría cuando aseguras algo por encima de su valor, pagando de más. Ante un siniestro, la compañía tan sólo indemnizaría por el daño efectivamente causado (el valor real o valor de nuevo si estuviera incluido).

El infraseguro se produce cuando el valor que declaras es inferior al que tiene la propiedad. Así, en caso de contingencia, la aseguradora aplicará la regla proporcional y solo te indemnizará la parte de los daños que realmente está cubierta.

2. Adaptarse a las transformaciones en la vivienda

Los hogares van cambiando junto a las personas que los habitan, por lo que es probable que con el paso del tiempo no necesites todas las coberturas que contrataste en un primer momento; o, al contrario, debas ampliarlas para incluir nuevos riesgos. La incorporación o eliminación de medidas de seguridad, la renovación del sistema de calefacción, montar un negocio en casa o incluso el número de personas que residen en el piso influyen en la prima a pagar.

3. Encontrar mejores condiciones

Aunque no lleves a cabo grandes reformas del hogar ni varíe sustancialmente el valor catastral de tu propiedad, otra buena razón para actualizar la póliza es buscar de una protección más amplia o un precio más competitivo. Las compañías modifican cada cierto tiempo sus productos, incluyendo nuevas garantías y servicios que, probablemente, no están contemplados en tu contrato original. Si aprovechas esas novedades, podrías disfrutar de condiciones mejoradas que representen un ahorro o te proporcionen un nivel superior de comodidad y tranquilidad.

Comprueba la idoneidad de las garantías de tu contrato todos los años.

¿Cómo revisar tu seguro de hogar para tener una protección adecuada?

Para saber si necesitas una actualización de tu póliza, debes leer atentamente el contrato. Así podrás conocer las coberturas y prestaciones que ofrece tu aseguradora. Analiza las transformaciones que han experimentado tu hogar y situación personal para valorar si debes ampliar o reducir su alcance.

Herramientas como el comparador de seguros de Santalucía te permitirán identificar el producto idóneo para tu vivienda. Si encuentras una modalidad que se adapte mejor a tus necesidades o precisas alguna variación, puedes comunicárselo a tu entidad.

De hecho, la Ley de Contrato de Seguro obliga a notificar cualquier cambio que implique una agravación o disminución del riesgo, sin esperar al vencimiento. En ese caso, la compañía tiene dos meses para proponer una modificación y contarás con un plazo de 15 días para aceptarla o rechazarla. Si quieres rescindir el contrato para elegir otro más conveniente, deberás informar por escrito al menos un mes antes de su fecha de finalización.

Como colofón, recuerda que los seguros multirriesgo del hogar no son productos inmutables, sino que debes revisarlos anualmente para evitar que queden anticuados y dejen de cumplir su función: resguardar tu vivienda y pertenencias.

 
 

¡Mantente protegido en todo momento! Actualiza tu seguro de hogar eligiendo las coberturas de Santalucía que mejor se ajusten a tus necesidades.

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