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Con el verano salimos más a comer fuera de casa, picoteamos entre horas, tenemos los horarios un poco cambiados…En definitiva, nos cuidamos menos.
Pero hay una forma de cuidarse y poder disfrutar de igual manera. El truco está en cenar bien cuando se está en casa e intentar no excederse siempre que uno sale fuera. ¿Cómo? Pues te vamos a dar unos consejos para degustar las mejores cenas y las más saludables. ¡Apunta! 

Consejos

Lo bueno del verano es que tendemos a comer más ligero a causa del calor y esto supone un beneficio para nuestra salud. Pero además, hay una serie de consejos que puedes llevar a cabo:

  • Hidratación. Es fundamental durante todo el año pero, sobre todo, en verano. En esta época es más sencillo sufrir una deshidratación debido a la sudoración excesiva provocada por el exceso de calor.
  • Frutas. La fruta también ayuda a mantener el cuerpo hidratado y además es una gran fuente de antioxidantes que nos ayudan a proteger el organismo. Vitaminas, minerales y fibra, son algunos de los nutrientes que aportan. Lo ideal es consumir 3 piezas de fruta al día.
  • Verduras y hortalizas frescas. Gazpachos, salmorejos, ensaladas, pistos…combina las hortalizas y las verduras a tu gusto y crea platos saludables y llenos de color que aportan agua, fibras, hidratos, vitaminas, minerales y antioxidantes.
  • Cereales integrales. Si se te apetece añadir pan a tus cenas o utilizar cereales, que sean siempre integrales. Te aportarán más fibra, vitaminas y minerales que el pan blanco.
  • Pescados. Lo bueno del verano y pasar unos días en la costa es que puedes disfrutar del mejor pescado fresco. Opta por cenar bonito, sardinas, boquerones… pescados azules que son ricos en Omega3 y que aportarán a tu organismo proteínas, fósforo y yodo. Además de estar deliciosos.

Además del tipo de comida, también debes tener en cuenta la preparación de la misma. Evita las frituras pesadas, los platos con muchas salsas y huye de las comidas preparadas. En cambio, la mejor opción es optar por cocinar en crudo, al vapor, a la plancha o al horno. Podrás disfrutar de todo el sabor sin añadirle pesadez a tus platos.
Si te quieres dar un capricho, puedes optar por sustituir el azúcar por canela. Esta especia ayuda a activar el metabolismo y reduce nuestra ansia de comer alimentos dulces.
Otro truco para disfrutar de una cena saludable es no olvidarse del tamaño de las raciones. No eches en el plato más de lo que puedas o debas comer. Si has cocinado demasiado, sin problema. Lo puedes guardar para otro día o congelarlo para más adelante.
Al final, para cenar sano solo necesitas tener ganas de cuidarte y un poco de tiempo para preparar las cenas. Que sean muy elaboradas o no ya dependerá de ti. Pero, te animamos a que empieces a cuidar tu alimentación para así disfrutar de un estilo de vida más saludable.

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