Diabetes gestacional: síntomas y tratamiento
La diabetes gestacional es una de las patologías más comunes asociadas al embarazo. Se estima que entre un 3 y un 10 % de las mujeres embarazadas la padecen y, aunque no suele suponer un riesgo grande ni para ti ni para tu bebé, sí que puede traer consigo complicaciones en el momento del parto. Si quieres saber más, sigue leyendo: a continuación contestamos a las dudas más frecuentes sobre ella.
Todo sobre la diabetes gestacional y sus síntomas
Conocer la respuesta a las preguntas más habituales sobre la diabetes gestacional y sus síntomas te va a permitir avanzar en tu embarazo con mayor tranquilidad y seguridad. Si tienes miembros en tu familia que la hayan sufrido, o sospechas que podría ser tu caso, estar alerta y conseguir un diagnóstico temprano mejorará tu calidad de vida.
¿Qué es la diabetes gestacional?
También se conoce con el nombre de diabetes mellitus gestacional o DMG. Se trata de una de las enfermedades femeninas más habituales durante el embarazo, y se produce porque tu propio organismo no es capaz de producir insulina. Esto hace que las células no puedan absorber la glucosa, por lo que no se asimila su energía y sube la concentración de azúcar en sangre.
¿Por qué se produce la DMG?
Aunque se desconocen las causas exactas, se sabe que está relacionada con los cambios metabólicos y hormonales durante la gestación. A partir de tu decimosegunda semana de embarazo, tu cuerpo necesitará más azúcares para poder dar energía al bebe, que aún no es capaz de producirla por sí mismo.
Es por eso que, a través de la acción de las hormonas, la sensibilidad de tus tejidos y células a la insulina se reducirá considerablemente para facilitar que la energía vaya a parar a tu bebé. Pero cuando su actividad es excesiva la insulina deja de trabajar, por lo que tus niveles de glucosa en sangre aumentarán y aparecerá la diabetes tipo 2.
¿Cuáles son los síntomas de la diabetes gestacional?
En la mayoría de casos no aparecen síntomas visibles en quienes la padecen. No obstante, puedes notar que tienes más sed de lo normal o más ganas de ir al baño. En otros casos también se ha detectado fatiga, visión borrosa, infecciones de vejiga, vagina y piel, náuseas y vómitos. Como puedes ver, muchos de estos síntomas son comunes a todas las mujeres gestantes, por lo que la mejor manera de saber si la tienes es a través del seguimiento médico.
¿Qué riesgos implica la DMG?
Aunque no representa un riesgo severo para tu vida, sí que puede traer consigo complicaciones en el nacimiento de tu hijo. La consecuencia más directa para los bebés es un incremento de peso. Por tu parte, tendrás un mayor riesgo de sufrir hipertensión, tener un parto por cesárea o tener diabetes de tipo 2 aun después de dar a luz.
Ahora que conoces las respuestas a las preguntas más frecuentes sobre la diabetes gestacional, solo te queda seguir las recomendaciones de tu médico para prevenirla o tratarla. Aunque depende de tu caso personal, en general con ejercicio moderado y una buena alimentación podrás mantenerla bajo control.