Cada vez vivimos más años. Gracias a los avances en salud y bienestar, nuestra esperanza de vida se alarga, pero ¿estamos preparados?
Tal y como comentaba Andrés Romero, director general de Santalucía en un reciente artículo, “que vivamos cada vez más y mejor es, sin duda, una buena noticia para las personas y para la humanidad. Pero ese fenómeno imparable tiene múltiples implicaciones para las sociedades”.
Así se recoge en el libro “La vida de 100 años”, publicado con la colaboración del Instituto Santalucía. Pronto la vida tendrá múltiples etapas, transformando la forma en la que nos relacionamos, trabajamos y también la manera en la que cuidamos nuestra salud.
“Ante esa realidad tendremos que reflexionar sobre cómo enfocar las necesidades de las personas que llegan a esas edades. Más teniendo en cuenta que el aumento de la vida se está produciendo casi exclusivamente después de la jubilación”, explica Andrés Romero.
Envejecer de forma activa es todo un reto y por ello, en Santalucía, con motivo del Día Mundial de la Salud, reafirmamos nuestra apuesta por impulsar y fomentar el bienestar de las personas mayores.
El envejecimiento activo es uno de los cuatro ejes de actuación de nuestro plan de responsabilidad social corporativa “Comprometidos con el entorno” y forma parte de nuestra contribución al ODS 3, Salud y bienestar.
Desde esta área de actuación impulsamos el aprendizaje y nuevas experiencias de las personas mayores para rediseñar la vida adulta a través de proyectos de inclusión, participación y seguridad.
Para conseguir este objetivo, trabajamos en línea con dos compromisos concretos:

1.    Contribuir a reducir la brecha digital de los mayores y la desigualdad en el acceso o conocimiento a las nuevas tecnologías con talleres de alfabetización digital. Uno de estos cursos es “Piérdele miedo al smartphone y gana confianza” que realizamos en colaboración con la Asociación ADITEC para formar a nuestros mayores en nuevas tecnologías y contribuir a mejorar su integración en la nueva sociedad digital.
2.    Ofrecer herramientas y recursos para promover la salud y seguridad de las personas mayores. En este sentido destacan actividades como los talleres de prevención de accidentes en el hogar que realizamos junto a Cruz Roja o las jornadas de voluntariado en las residencias Ballesol, en las que personas voluntarias del Grupo Santalucía comparten experiencias y aficiones como la lectura.

Mediante estos compromisos continuaremos trabajando para construir sociedades saludables en las que el bienestar esté asegurado a cualquier edad.