Es la intervención de moda para los que buscan rejuvenecer su imagen sin tener que pasar por un proceso extremadamente invasivo. Sí, tiene una evolución lenta, pero lo cierto es que, pasados unos meses, los resultados suelen ser verdaderamente impresionantes. Ahora bien, ¿es realmente consciente quien decide someterse a uno de estos tratamientos de todos los cuidados que implican los injertos capilares? ¡Es eso precisamente de lo que hemos venido a hablaros hoy!

¿Qué hacer tras un trasplante capilar?

Por gracia o por desgracia, al igual que ocurre con otros muchos tratamientos de belleza, los injertos capilares no se terminan con el implante de los cabellos en las zonas en las que ya no había pelo. A partir de ahí comienza una carrera de fondo para conseguir que se afiancen en su nueva ubicación y, de paso, que los cabellos no implantados, los naturales, no terminen cayéndose también.

Lo primero que conviene saber es que durante las 24 horas posteriores a la intervención conviene no lavarse la cabeza, aunque sí conviene mantenerla hidratada con agua termal. ¿Y a partir de ahí?

1. Durante los primeros días, bajo prescripción médica, conviene tomar algún tipo de antiinflamatorio y/o antibiótico que ayude a paliar los molestos efectos secundarios.
2. La práctica deportiva queda terminantemente prohibida durante los 15 días inmediatamente posteriores a los injertos capilares.
3. Además, durante el primer mes tras la operación los rayos del sol no podrán incidir directamente sobre el cuero cabelludo. Y, por supuesto, los baños en el mar o la piscina, ni en sueños.
4. Lo más apropiado es utilizar un champú neutro y aplicarlo sin frotar. ¿La mejor técnica? Pulverizarlo, dejarlo actuar unos minutos  después aclararlo tocando lo menos posible.

Poco a poco el cabello nuevo irá creciendo y adquiriendo su forma y aspecto finales, aunque para ello deberá pasar casi un año desde el injerto. Será entonces cuando las rutinas de higiene y cuidados empiecen a normalizarse poco a poco.

Cómo mantener un cabello saludable 10 años después de un trasplante capilar

Lo normal es que el cabello trasplantado no vuelva a sufrir alopecia. Es decir, que no lo perdamos, aunque sí hay que tener claro que sufrirá los efectos del paso del tiempo del mismo modo que el resto de nuestro cuerpo. O sea, que se volverá cano, perderá densidad y verá como otros cabellos que no habían sido trasplantados terminan sucumbiendo a los años.

Eso sí, si de verdad queremos lucir una cabellera envidiable lo ideal es poner de nuestra parte tras los injertos capilares:

• Tomar vitaminas por vía oral, aunque conviene que estén prescritas por un especialista para nuestro caso concreto.
• Cambiar la dieta por una más saludable y practicar deporte con asiduidad.
• Optar por soluciones que incentiven el crecimiento capilar, como las sesiones de plasma rico en plaquetas.

Esto, unido a la supervisión de un equipo médico experto, es la mejor forma de contar con una cabellera saludable 10 años después de un trasplante capilar. De ahí la necesidad de contar con un buen seguro de salud con especialistas en injertos capilares entre sus profesionales.

Injerto capilar en la mujer, ¡una opción a tener muy en cuenta!

Suelen recurrir menos a este tipo de tratamiento, pero las mujeres cada vez representan un porcentaje mayor de los injertos capilares. Lo cierto es que hasta ahora se lo pensaban un poco más porque una de las necesidades del preoperatorio es llevar la cabeza rapada durante unos meses y este no es un paso fácil de dar.

Sin embargo, asimilado esto y que el cabello definitivo tardará unos meses en salir, y teniendo en cuenta que a día de hoy nadie juzga a nadie por un cambio de aspecto temporal, parece que las mujeres al fin han decidido dar un paso al frente.

Lo único realmente importante a la hora de afrontar los injertos capilares es encontrar un buen equipo de profesionales. ¡El resto, por suerte, cada vez resulta más sencillo!