Cenar como un mendigo eso es lo que dice el refrán y eso es lo que deberíamos hacer todas las noches. Para que aprendas a disfrutar de unas cenas ligeras y saludables queremos darte unos cuentos consejos, pero antes debemos conocer la razón.

¿Por qué cenar ligero?

Realizar cenas ligeras facilita las digestiones, ya que el organismo no tiene que realizar ningún sobreesfuerzo para hacer la digestión, y ayuda a descansar por las noches. Para que esas cenas sean saludables lo recomendable es que se realicen dos horas antes de acostarse. De esta manera por la mañana el cuerpo tendrá más energía y se encontrará más ligero.

¿Cómo deben ser las cenas ligeras?

Antes de empezar por el menú de la cena debemos pensar en la hora en que cenamos. Lo ideal es que la cena se realizara sobre las 8 de la tarde y siempre como mínimo con dos horas de margen antes de acostarse.
Una cena ligera, que también nos ayudará a adelgazar, está compuesta por una ración de proteínas acompañada de una ración de verduras, frutas o cereales. Una cena adecuada debe ser saciante, pero de fácil digestión, además debe aportar un contenido calórico bajo y evitar excesos en grasas y azúcares. 
Algunos ejemplos de cenas saludables que además te ayudan a adelgazar son:

• Cremas de verduras y sopas que son muy digestivas y saciantes
• Pescados o carnes a la plancha
• Verduras y revueltos

Como ya te dijimos en otras ocasiones es importante conocer los alimentos que se ingieren para poder llevar una alimentación sana y consciente, también conocida con Mindful Eating, una nueva forma de entender la alimentación que se basa en entender qué se come y por qué.
Además de llevar una dieta sana y equilibrada se recomienda que se realice ejercicio físico como mínimo dos días a la semana. Mens sana in corpore sano.