Lesiones cutáneas: causas y consejos
Las lesiones cutáneas son de frecuente aparición, y pueden representar una patología local o ser la manifestación de un problema sistémico. Al ser la dermis un órgano tan extenso, resulta necesario prestar atención a estas alteraciones.
Lesiones cutáneas frecuentes
Las enfermedades de la piel pueden tener diversos orígenes y afectar a una o a varias de sus estructuras. Nos referimos a las uñas, a los folículos pilosos y a las glándulas sebáceas o sudoríparas. El especialista indicado para tratarlas es el dermatólogo, al que debes acudir si presentas una alteración.
Acné
Aparece a cualquier edad, pero es más frecuente en la adolescencia. Las glándulas sebáceas se llenan de detritus, lo que deriva en puntos negros, nódulos y pústulas. Es un problema básicamente estético, pero puede impactar negativamente en tu autoestima.
La prevención consiste en mantener la piel muy limpia mediante el uso de jabones especiales. Además, existen productos destinados a controlar la proliferación de la bacteria Propionibacterium Acnés, responsable de la infección de estas lesiones.
Dermatitis atópica
Suele hacer acto de presencia en la infancia. Se caracteriza por la presencia de placas que, por lo general, se ubican de forma simétrica. Las verás situadas en las superficies flexoras de brazos y piernas, aunque también afectan al tronco.
En estos casos, la piel carece de ciertas defensas, lo que causa una sensibilidad especial a los agentes irritantes. Es un tipo de eccema que cursa enrojecimiento, prurito y descamación fina. Para evitar los brotes es conveniente que te protejas de los agentes irritantes y uses productos hidratantes y antihistamínicos. También debes evitar el rascado, ya que puede empeorar el cuadro.
Vitiligo
Esta enfermedad se caracteriza por la aparición de áreas de despigmentación, y tiene su origen en el sistema inmune, que ataca y destruye los melanocitos. Las lesiones pueden aparecer en cualquier parte. Esta despigmentación puede involucrar incluso a las mucosas, al cabello, a los ojos y a las pestañas.
No existe cura ni prevención, pero las manchas se pueden atenuar con medicamentos tópicos y fototerapia. Estos tratamientos pueden hallarse incluidos en un seguro de salud y ralentizar el curso de la enfermedad.
Lesiones cutáneas malignas
Algunas afecciones de la piel pueden tener un carácter maligno o premaligno. Por ello, es imprescindible que las conozcas y que las vigiles. Además, por supuesto, de restringir la exposición a la radiación solar, muy relacionada con su aparición.
Lesiones no melanomatosas
En este grupo de patologías se encuentran la queratosis actínica, el carcinoma basocelular y el espinocelular. Verás que son lesiones en forma de manchas descamativas y más oscuras que el resto de la piel. Su origen tiene que ver con la radiación solar y con la presencia del virus del papiloma humano o VPH.
Melanoma maligno
Esta cáncer de piel es frecuente entre las personas de raza blanca y aparece en las zonas más expuestas al sol, como la cara y los brazos. Se trata de una lesión similar a un lunar, pero que presenta rápido crecimiento, asimetría e irregularidad en los bordes y en el tono de la pigmentación.
Las lesiones cutáneas comportan una importancia variable. Para cuidar tu salud es preciso que consultes a tu dermatólogo.