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Seguro que has oído hablar del trail running, esa modalidad en la que los corredores atraviesan senderos, caminos… todo en plena naturaleza recorriendo montañas o bosques fuera de pista.

Este deporte muy exigente a nivel físico, aporta a todo aquel que lo práctica un sinfín de alicientes gracias al contacto con la naturaleza, según los expertos ayuda a mejorar la concentración, ganar autoconfianza y eliminar el estrés.  
Seguro que ya te está picando el gusanillo. Así que aquí te dejamos unos pequeños consejos para iniciarte en este apasionante deporte: 

Subir despacio, bajar rápido

Los recorridos a través de caminos y senderos, pueden tener en su gran mayoría fuertes pendientes. En este deporte los cambios de ritmo son constantes y aunque te pueda parecer extraño, en las carreras las subidas es recomendable hacerlas andando ayudándote con los brazos en las rodillas durante las pendientes más pronunciadas. 

El asfalto y la montaña no son comparables

No debemos comparar nunca ni los entrenamientos en asfalto ni las distancias. La peculiaridad de esta disciplina se encuentra en la distancia y el desnivel. Si te quieres aventurar en el Trail empieza poco a poco, distancias cortas y con pequeña dificultad en caminos y pendientes. 

El entrenamiento, dinámico y por montaña  

Para comenzar con los entrenamientos, no debes obsesionarte. Tramos cortos de pocos kilómetros serán más que suficientes para ir adaptándote y conociendo el terreno.  
Céntrate más en el tiempo que en la distancia. Poco a poco acostumbrarás a tu cuerpo a estos incesantes cambios de ritmo tanto en desniveles, subidas y bajadas o los propios obstáculos que irás encontrando en el camino.

Siempre bien equipado  

Llevar un calzado cómodo siempre es importante, pero en éste caso tenemos que darle énfasis a las zapatillas que vamos a utilizar. Se recomienda que tengan una buena amortiguación y estabilidad, debes pensar que en todo momento el terreno es inestable y muy cambiante durante el recorrido. 
En muchas carreras los corredores utilizan bastones como apoyo en subidas o descensos, muy útil en los comienzos para mantener la estabilidad. 
Y sobre todo llevar una pequeña mochila en la que tener agua, ropa impermeable… ¡no olvides que estamos en plena naturaleza!  

Hidratarse y una buena alimentación  

En el Trail running la hidratación y alimentación son muy importantes. Durante las carreras muchos deportistas utilizan geles y diferentes bebidas isotónicas, ya que el desgaste y la deshidratación en carreras largas (a veces de más de 3 horas) es significativo. 

¡Y disfruta!  

Entrena pero también relájate. Salir a correr por la montaña  es muy difícil de comparar a cualquier otro deporte, el clima, el paisaje, los cambios constantes de sonidos y movimientos en la naturaleza, te producirán sensaciones increíbles y una especie de enganche a las escapadas que muchos ya experimentan.   
Si tienes ganas de disfrutar del aire libre cambia la ciudad por la montaña, siempre protegido con un seguro que te asista en cualquier ocasión. Coge tus zapatillas y sal a rodar, ¿a qué esperas? 

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